Rehabilitación integral de un teatro inaugurado el año 1953, obra del arquitecto Josep Maria Sagnier i Vidal-Ribas (1890-1978). Se trata de un edificio entre medianeras dentro de un recinto escolar, sin fachada directa a la calle. Además del deterioro debido al paso del tiempo, el edificio presenta una importante carencia de espacios destinados a los usos sociales propios de esta tipología, como el vestíbulo, el “foyer”, los núcleos de circulación vertical y diferentes servicios anexos. Posiblemente, en un origen, este tipo de espacios no eran tan necesarios, ya que existía una vinculación funcional directa con los edificios adyacentes, como muestran diversos pasillos y puertas tapiadas, tanto a nivel de planta baja como de anfiteatro y “gallinero”. La caja de escena se encuentra en una posición más cercana a la calle y la sala queda en la parte trasera, limitando con una zona exterior de uso deportivo.

Se propone formalizar un acceso propio, autónomo del resto de actividades, a través de un pequeño jardín que separa el teatro de la calle, abriendo una puerta en el edificio contiguo para apropiarnos de su planta baja como nuevo vestíbulo que nos conduzca a una primera escalera y a un nuevo “foyer” situado detrás de la sala. El volumen ampliado que alberga el “foyer” abraza la sala en toda su anchura, con una planta de altura, y un fondo limitado, de unos 5 metros, por la proximidad del volumen destinado a vestuario y servicios de las pistas deportivas. Esta proximidad, tan poco deseada, sugiere una búsqueda de iluminación cenital con lucernarios que garanticen la calidad espacial i eviten las vistas directas. Una segunda escalera que lleva al anfiteatro se construye en el otro extremo del “foyer” y también se ilumina con un lucernario abierto al nivel de la cubierta de la sala.

La sala se remodela por completo. Se eliminan las barreras arquitectónicas existentes y se renueva el patio de butacas con un aforo para 705 personas entre platea y anfiteatro. La nueva cubierta permite la ubicación de la maquinaria exterior de ventilación y climatización en una posición oculta, y genera un espacio intersticial entre el acabado exterior y el nuevo cielo raso que facilita el registro de las instalaciones de iluminación.

La caja de escena se consolida, se rehabilitan cubierta y fachadas, incorporando aislamiento térmico y estanco, con un acabado de plancha metálica. Se conserva el peine. Se construye un nuevo forjado en la posición e inclinación del actual escenario, que permita aprovechar el espacio inmediatamente inferior para ubicar camerinos y servicios. El nuevo techo incluye una parte registrable para permitir el paso de escenografías des del taller de montaje, situado a pie de calle para facilitar la entrada de material. También se formaliza una nueva escalera de servicio que relaciona verticalmente todos los niveles de la caja de escena.